Para muchos, la temporada de navegación de 2021 ha empezado demasiado tarde, pero ¿hay algo que podamos hacer para aprovechar unas semanas más sobre el agua? Por supuesto, ya que la llegada del invierno no nos priva de oportunidades, aunque los días sean más cortos. Estos son nuestros diez consejos para navegar en invierno.

1 Planifica con antelación y navega durante el día

Los días son muy largos en verano y no pasa nada si te retrasas un poco antes de ponerte en marcha: aún tienes tiempo antes de que caiga la noche. Algo muy diferente a lo que ocurre a finales de año; aquí, puedes aprovechar que las tardes son más largas para preparar la embarcación, planificar la navegación y asegurarte de que todo está en orden.

Recuerda: la aplicación Simrad® es ideal para registrar ideas y preparar la navegación la semana anterior.

3 Comprueba si hay algún cierre que afecte a la navegación

Si el uso de tu embarcación depende de la apertura de puentes y esclusas, asegúrate bien de que el mantenimiento otoñal no afectará a tus planes.

5 Revisa el estado de la embarcación cada vez que la utilices

Aunque debería ser la norma, es un aspecto que cobra más importancia en temporada baja. Asegúrate de que todos los equipos relacionados con la seguridad de la embarcación funcionen perfectamente, incluidos los equipos electrónicos náuticos.

Presta especial atención a las baterías de arranque y de uso general. Su rendimiento se ve afectado por la temperatura ambiente. Si has notado que las baterías estaban en las últimas en verano, revísalas y cámbialas en caso necesario antes de navegar en otoño.

Revisa las luces de navegación; aunque no tengas intención de usarlas, es posible que se te haga tarde un día y no tengas más remedio. Navegar por la noche sin una iluminación adecuada es una infracción del Reglamento Internacional para Prevenir Abordajes y podría invalidar las coberturas del seguro.

7 Mantén la visibilidad

En otoño, la diferencia de temperatura entre el interior y el exterior es mayor, lo que provocará condensación en el parabrisas y en los paneles de plástico transparentes de la embarcación. No continúes con la travesía si la condensación te impide ver. Existen soluciones contra la lluvia que previenen la condensación en el vidrio, y también hay viejos trucos que funcionan. Uno de nuestros favoritos consiste en aplicar una gota de lavavajillas líquido y ecológico en un paño húmedo y frotar con él el cristal o el plástico. Hay quien prefiere frotar la superficie con la mitad de una patata. Ambas ideas ayudan a eliminar la condensación y a conseguir que los paneles de plástico y vidrio sigan siendo transparentes. También es indispensable tener un rascador con una hoja de goma, algo muy útil para secar el cristal después de limpiarlo.

9 Prepárate si tienes previsto realizar una inmersión

Si alguien va a practicar algún deporte acuático y es inevitable o es probable que se realice una inmersión, la sensación de frío llegará antes. Al hacerlo, intentarán salir del agua lo antes posible, así que revisa bien y comprueba que los sistemas de recuperación funcionan correctamente, y que la tripulación que permanezca a bordo se encuentre en plenas facultades físicas. Si alguien empieza a tiritar, ayúdalo a salir del agua inmediatamente. Los temblores son la primera de las tres etapas de la hipotermia y la última oportunidad de salvar a la víctima antes de que la situación empeore.

Para proteger contra el riesgo de hipotermia en todas las aguas, excepto en las bahías protegidas y más cálidas del Mediterráneo en octubre, reduce el tiempo de las sesiones y asegúrate de que todo aquel que realice una inmersión utilice un traje de neopreno o un traje seco con protección térmica.